El Ente Vasco de la Energía aconseja a los consumidores que revisen la potencia contratada y que incorporen medidas de ahorro y eficiencia energética
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Jueves 3 de abril de 2014 | ENTE VASCO DE LA ENERGÍA
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El pasado 1 de abril entró en vigor el nuevo sistema para determinar el precio de la energía, que contará con un periodo transitorio de tres meses para que las empresas eléctricas adapten sus equipos.
El Real Decreto 216/2014, aprobado el pasado día 28 de marzo, determina la manera en la que se realizará el cálculo del precio voluntario al pequeño consumidor que serán de aplicación a los consumidores de baja tensión con potencia contratada hasta 10 kW a partir del 1 de abril. Viene a sustituir a las tarifas de último recurso existentes.
Para el cálculo de los precios voluntarios se sumará el coste de producción de energía eléctrica, además de los peajes de acceso, cargos y los costes de comercialización que correspondan. La estructura principal de la factura se mantiene igual: una parte fija en función de la potencia contratada y una parte variable en función del consumo. Lo que cambia con el nuevo sistema es la forma de calcular la parte variable. En las antiguas tarifas se establecía un precio fijo único para todo un trimestre. Con el nuevo sistema se calcula en base al precio horario de la electricidad del mercado mayorista. Es decir, en cada hora del mes hay un precio diferente.
El Real Decreto 216/2014, aprobado el pasado día 28 de marzo, determina la manera en la que se realizará el cálculo del precio voluntario al pequeño consumidor que serán de aplicación a los consumidores de baja tensión con potencia contratada hasta 10 kW a partir del 1 de abril. Viene a sustituir a las tarifas de último recurso existentes.
Para el cálculo de los precios voluntarios se sumará el coste de producción de energía eléctrica, además de los peajes de acceso, cargos y los costes de comercialización que correspondan. La estructura principal de la factura se mantiene igual: una parte fija en función de la potencia contratada y una parte variable en función del consumo. Lo que cambia con el nuevo sistema es la forma de calcular la parte variable. En las antiguas tarifas se establecía un precio fijo único para todo un trimestre. Con el nuevo sistema se calcula en base al precio horario de la electricidad del mercado mayorista. Es decir, en cada hora del mes hay un precio diferente.
La determinación del coste de producción de energía eléctrica se realiza a partir de ahora con base en el precio horario de los mercados diario e intradiario durante el período al que corresponda la facturación, desapareciendo el mecanismo de subastas. La facturación se efectuará por la comercializadora de referencia (antes denominada “de último recurso”) con base en lecturas de consumo horarias para aquellos suministros que cuenten con equipos con capacidad para telemedida. Para el resto se considerarán perfiles de consumo.
Contadores inteligentes
Con la nueva tarifa han adquirido gran relevancia los contadores inteligentes, que en Euskadi se están instalando desde el año 2012. Actualmente hay alrededor de 200.000 equipos instalados, pero durante este año se alcanzarán los 250.000 (se está dando un impulso especial con el proyecto Bidelek Sareak desarrollado entre el Ente Vasco de la Energía e Iberdrola para el desarrollo de redes inteligentes en los municipios de Bilbao y Portugalete, con ampliación a la zona rural de Lea-Artibai). Hay que recordar que existen 1.130.000 contratos de baja tensión, de los cuales tienen Tarifa de Último Recurso (TUR) unos 800.000 consumidores, y de éstos existen unos 45.000 con discriminación nocturna.
Los contadores instalados en el País Vasco están preparados para poder facturar en base a consumos horarios.
¿Cómo nos afecta el nuevo cambio de factura?
Desde el 1 de abril se factura en base a precios horarios reales de mercado. Los precios se sabrán el día anterior que es cuando cierra el mercado diario.
El nuevo sistema supone un cambio de modelo, pasando de un modelo en el que el precio del coste estimado de la energía en el mercado diario se fijaba a priori a través de un mecanismo con un precio de futuro como era el caso de las subastas CESUR, a un mecanismo en el que el consumidor abonará el coste horario que ha tenido en el mercado la energía consumida en el periodo.
El consumidor acogido al Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVCP), antigua TUR, no tendrá que hacer nada, ni comunicar nada, ni modificar sus aparatos de medición. El único cambio para los usuarios acogidos a este Precio Voluntario, que son la mayor parte de los pequeños consumidores, consiste en que la factura se calculará con la media del precio de la electricidad en el mercado del período de facturación, en lugar de con el precio fijado en la subasta. Cuando el usuario tenga un contador inteligente conectado y operativo, se facturará directamente el precio del mercado de cada hora a la energía consumida en esa hora.
Las empresas eléctricas disponen de un plazo máximo de tres meses para adaptar sus sistemas informáticos y facturar de acuerdo al nuevo sistema. Hasta ese momento se le continuará aplicando el mismo sistema y precio del primer trimestre del año (48 euros/MWh), que se regularizará posteriormente.
Alternativas para el consumidor
Ahora el consumidor eléctrico tiene varias posibilidades, en concreto tres: puede elegir entre pagar el precio real del mercado horario (precio voluntario para el pequeño consumidor) a la comercializadora de referencia; otra opción es un contrato estándar de duración anual con precio fijo que las comercializadoras obligatoriamente tendrán también que ofrecer a los usuarios por si éstos prefieren optar por una mayor estabilidad en los precios. Finalmente, está la opción de irse al mercado libre a través de un contrato con una compañía comercializadora eléctrica.
Consejos del EVE
Para todos los actuales consumidores acogidos a la TUR, la modalidad de contratación con la comercializadora de referencia pasará automáticamente a precio voluntario para el pequeño consumidor, salvo que el actual consumidor diga lo contrario de forma expresa.
Se abre, por lo tanto, la oportunidad para que los consumidores domésticos en base a las señales de precio del día siguiente realicen gestión de la demanda, decidiendo consumir menos en las horas más caras y consumir en momentos de precios más bajos para optimizar su factura energética.
El consejo general del EVE para todos los consumidores ante la actual regulación es revisar la potencia contratada para ajustarla e incorporar medidas de ahorro y eficiencia energética en el hogar (electrodomésticos eficientes, iluminación de bajo consumo y, en general, el uso racional de la energía). Estas últimas medidas son las que siempre rebajan la factura.
Para los que dispongan de contadores inteligentes y facturen en base a precios horarios, se recomienda desplazar consumos a las horas de menor coste (consumo nocturno, por ejemplo, para programar lavadoras y lavavajillas).
Finalmente, el EVE aconseja a todos los consumidores acogidos a previo voluntario para el pequeño consumidor leer la nota informativa de la factura de los comercializadores sobre el nuevo sistema de facturación.
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